“Al Green no está de moda, está en órbita, y deberíamos dejar de referirnos a él como una estrella, hay muchas estrellas en el cielo, Al Green es la Luna, y sólo hay una Luna y un solo Al Green».

Don Cornelius, presentador de Soul Train. Marzo,1973 

Let´s stay together y Al Green (1946, Forrest City, Arkansas) han superado la prueba del tiempo. Quisiera recordarlo en su mejor momento, cuando era uno de los mejores cantantes de soul, tal vez el mejor de todos.  

En enero de 1972 se lanzaba su disco Let’s Stay Together  y dos semanas después, la canción que le daba el título subía a lo más alto de las listas de singles de Estados Unidos. Ese fue el comienzo de los años en los que Green se convertiría en el faro de la música soul y en la mayor estrella de su país entregando tres míticos discos.

Sencillo, vehemente, auténtico y capaz de transmitir tantas emociones en una simple frase, amaba la música desde niño. Su padre era muy religioso y para él, todo lo que no fuera góspel era pecaminoso. En cambio, para el pequeño Al uno de sus ídolos era  Elvis Presley. Con veintiún años grabó su disco debut (1967), Back Up Train, que tuvo un éxito discreto en las listas de Rythm & Blues. Su carrera no llegó a despegar hasta que entró en contacto con Willie Mitchell, un trompetista, líder de una banda y productor que vio en la voz de Green un diamante sin pulir.   Mitchell lo incluyó en su sello y, con la canción original de Green I’m so tired of being alone, del álbum Gets next to you (1971), encontraron la fórmula perfecta. Puro groove y soul que lo convirtieron en uno de los cantantes más destacados de los años 70.

Al Green y su productor Willie Mitchell

Green era un apasionado y quería cantar al límite de sus cuerdas vocales con todo el feeling del soul, al estilo de Otis Redding o Sam Moore, pero Mitchell le insistía en que suavizara su tono de voz.  Fue así como lograron la perfección, una voz arenosa, suave y sensual.  En 1972, con veintiséis años, el cantante había escrito la canción Let’s Stay Together. Que dio origen al álbum con el mismo nombre. Green se puso frente al micrófono y comenzó a cantar, entonando las palabras como si se las estuviera murmurando a su amor al oído.

En el mismo álbum Green grabó una de las canciones íconos de los Bee Gees How can you mend a broken heart. El resultado, una de las mejores versiones de la historia alcanzando matices increíblemente delicados de sentimientos sólo con su voz y con un profundo sentido dramático. El álbum Let’s stay together se transformó en uno de los clásicos del soul que ha trascendido debido a su sonido único y a cómo nos conecta profundamente con su letra. Otras bellezas en este álbum:  I Never Found a Girl  y el blues en It Ain’t No Fun to Me, son algunas de mis favoritas.  

En octubre de 1972, Al Green lanza su álbum I´m still in love with you que comparte algunas similitudes con su álbum predecesor. Se distingue por su música suave y un tono romántico. Green comenzó a explorar la música country cantando For the Good Times de Kris Kristofferson y Oh Pretty Woman de Roy Orbison.

Portada del disco: «Let’s stay together» (1972)

Y en mayo de 1973, aparece el álbum Call me. Green deja que su voz deambule por todos los rincones. Mitchell lo apoya con una banda excepcional tocando arreglos ajustados y limpios. La canción You ought to be with me es cautivadora en este disco.

Al Green abandonó su carrera musical en su apogeo en la década de los 70 para convertirse en reverendo, después de sufrir un feroz ataque por parte de su novia de entonces. Estos hechos lo afectaron profundamente y buscó refugio en la religión. Sus siguientes discos se orientaron fuertemente al góspel con la excepción de algunas colaboraciones especiales.

Su obra maestra Let´s stay together, hoy un clásico por derecho propio, favorita de David Bowie, Barack y Michelle Obama, dio paso a unos frenéticos meses en los que entregó sus tres mejores discos y varias de sus canciones más recordadas. Increíblemente, la canción que cerraba el álbum Call Me fue Jesus Is Waiting. 

El registro y la pasión son componentes indispensables del Soul o música del alma. Let’s stay together reúne en poco más de tres minutos todos los ingredientes esenciales: arreglos de vientos, tempo contenido y constante, coros femeninos que rozan el gospel, además de una  interpretación vocal de Green de antología. 

Al Green hizo del soul la melodía más sensual y cuesta recordar si hay alguna otra canción como Let ‘s stay together que genere tantas emociones para los que amamos este género musical. Me pregunto qué pasaría si estos monstruos del Rythm & Blues rejuvenecieran mágicamente y volvieran a hacer música. «Música del alma» y reivindicativa desde tantas aristas. Raíces y suelo  en una mano, el cielo y la estratósfera en la otra.